Mi hija tenía muchas ganas de unas orejeras, así que aproveché una de las diademas que tenía para hacérselas.
Se hacen de forma rápida y fácil, ya que solo hay que tejer dos círculos del tamaño que queramos, rellenarlos (yo usé gomaespuma), coserlos y unirlos a la diadema.
Las hice con lana gruesa (así abrigan más!) de dos colores diferentes, una para la parte de fuera y otra para la de dentro.
Este es el resultado!
Para sujetar la diadema a la orejera es necesario poner un poco de pegamento que la fije en uno de los lados. Después, se termina de coser.
Para que mi hija tuviera localizadas y recogidas sus castañuelas, le tejí una funda (yo tengo una igual, pero de color rojo, que me tejió mi abuela hace más de 20 años!)
Es un rectángulo de lana azul realizado con puntos altos. Lleva una solapa con botones, y un ribete de color dorado viejo. La separación entre los dos bolsillos está hecha con una costura del mismo color que el ribete.